Categoría: Behavioral Design

  • Navidad, dulce Navidad: ¡las campañas que apelan a la memoria siempre funcionan!

    Navidad, dulce Navidad: ¡las campañas que apelan a la memoria siempre funcionan!

    Tenemos que reconocerlo: la Navidad ya no solo es una fecha en el calendario, es un estado mental. Y, desde la óptica del behavioral design, pocas emociones movilizan tanto el comportamiento como la nostalgia. Cuando llega diciembre y sus rituales asociados —luces en la calle, villancicos, anuncios plagados de familias felices — se activa un poderoso cóctel psicológico que las marcas conocen muy bien.
    No hablamos de sentimentalismo barato: hablamos de una palanca emocional con bases cognitivas profundas que influye en cómo decidimos, cómo compramos y cómo nos vinculamos con una marca.

    La nostalgia es, en términos de neurociencia, un “viaje emocional seguro”: te transporta al pasado, pero con un filtro cálido. Reconfortante. Familiar. Y, por eso mismo, es tan eficaz.

    En Navidad esa puerta emocional se abre, con una sonora patada, de par en par.

    La nostalgia como diseño conductual: una emoción que guía decisiones.

    La nostalgia activa varias dinámicas esenciales para el comportamiento humano:

    1. Seguridad emocional

    En un mundo incierto y en una sociedad tan caótica en la que transitamos, lo conocido tranquiliza. Por eso las campañas navideñas rara vez arriesgan: buscan repetir códigos familiares porque disparan esa sensación de estabilidad.

    2. Identidad

    Recordar quién eres (como diría Mufasa) te conecta con quién eres. La nostalgia refuerza el sentido de continuidad personal, una de las bases del diseño conductual orientado a pertenencia y coherencia.

    3. Calidez social

    La memoria emocional suele aparecer vinculada a figuras significativas: familia, amigos, infancia… La nostalgia aumenta el deseo de conexión y, por tanto, la predisposición a compartir, comprar para otros y participar en rituales colectivos.

    4. Recompensa dopaminérgica suave

    No es euforia, ¡es confort! Es la recompensa “no explosiva” que estabiliza el humor y predispone positivamente hacia una marca o experiencia.

    El momento navideño perfecto: por qué diciembre es el rey de la nostalgia.

    Diciembre es un contexto emocionalmente saturado: olores, colores, sabores, sonidos… todo funciona como cue sensorial y emocional. Aquí entran conceptos clave del behavioral design:

    • Trigerización multisensorial: Un simple sonido (campanillas, jingles), color (oro, rojo, verde), u olor (turrón, canela, clavo) puede reactivar recuerdos automáticos.
    • Efecto “reminiscence bump”: Entre la adolescencia y la juventud se consolidan recuerdos fuertes. Muchas de nuestras primeras navidades significativas se sitúan ahí.
    • Ritualización compartida: La Navidad es un conjunto de scripts culturales repetidos cada año: encender luces, montar el árbol, comprar la Lotería en doña Manolita, abrir el turrón, brindar con cava…

    Cada ritual es una oportunidad para que una marca se incruste en la memoria emocional del usuario.

    El poder del recuerdo en las campañas españolas: acompáñanos a dar un paseo conductual.

    Algunas marcas nacionales son maestras absolutas en activar la nostalgia como herramienta de diseño. Estas son las más representativas (y qué hacen realmente bien):

    1. Lotería Nacional: la tradición como “ancla emocional”

    Si hay una campaña que inaugura oficialmente la Navidad en España, es esta. El anuncio de la Lotería lleva décadas funcionando como un disparador emocional colectivo.

    Desde “¡No tenemos sueños baratos!” al icónico calvo de la Lotería, pasando por las historias más cinematográficas de los últimos años, esta campaña utiliza:

    • Storytelling emocional MUY humano, que no vende producto, sino suerte compartida.
    • Ritual anual: cada año esperamos el anuncio, convirtiéndolo en evento.
    • Narrativas de bondad: ayudan a reforzar valores comunitarios que ya asociamos a la Navidad.

    Aquí la nostalgia no es solo recuerdo: es pertenencia a un país y a una tradición cultural.

    2. Turrones Suchard: memoria gustativa y un jingle icónico

    Pocas marcas han conseguido un posicionamiento tan claro:  “En estas navidades, turrón de chocolate; en estas navidades, turrón de Suchard.”

    Nuestra marca favorita de turrón combina:

    • Anclaje sensorial (el sabor de siempre).
    • Un jingle que forma parte del imaginario colectivo.
    • Familias reales o situaciones cotidianas para evocar una Navidad “auténtica”.

    No buscan modernizar: buscan recordarte tu propia historia navideña.

    3. Campofrío: humanidad, humor y heridas colectivas

    Campofrío no trabaja la nostalgia desde lo cursi, sino desde lo cultural, social y reivindicativo. Sus anuncios funcionan porque se apoyan en:

    • Memoria generacional compartida (crisis, pandemia, pérdidas…).
    • Retratos emocionales de España con personajes reconocibles.
    • Narrativas de resiliencia, que conectan directamente con el tipo de nostalgia que reconforta sin endulzar demasiado.

    Campofrío no evoca solo “Navidad”; evoca “lo que somos”.

    4. Freixenet: el glamour dorado como ritual audiovisual

    Durante años, el anuncio de Freixenet era un ritual tan icónico como el del turrón o la lotería. Las burbujas doradas eran un “símbolo cultural” de celebración, año tras año, si bien es cierto que en la última década ha ido perdiendo fuelle.

    Es un ejemplo perfecto de:

    • Identidad estética consistente, casi casi sensorial.
    • Uso de celebridades como referente generacional.
    • Un tono aspiracional estable que conecta con “cómo imaginamos esa Navidad ideal”.

    ¿Por qué estas campañas funcionan tan bien? 5 claves conductuales.

    Aquí está el corazón del asunto. La nostalgia no funciona por sí sola: funciona porque activa mecanismos psicológicos que predisponen a la acción y al cariño hacia la marca.

    1. Familiaridad = confianza: Lo familiar reduce la incertidumbre. Y donde hay menos incertidumbre, hay más predisposición a comprar.

    2. Identidad en espejo: Cuando te ves reflejado —tu infancia, tu familia, tus rituales— sientes que la marca “te entiende”, parece incluso que habla en exclusiva de ti.

    3. Micro-dopamina emocional: La nostalgia activa un tipo de recompensa más duradera que el hype.

    4. Ritual anual: La repetición convierte la campaña en un hito esperado. La expectativa es, en sí misma, un diseño conductual.

    5. Anclaje multisensorial: Un sonido, un color, una textura: la marca queda asociada a un recuerdo en tu hipocampo.

    ¿Y qué lecciones nos deja esto para otras marcas?

    La nostalgia, bien usada, no es manipulación emocional: es conexión genuina. Las mejores marcas son las que permiten que el usuario rellene los huecos de la historia con sus propios recuerdos.

    Te damos algunos principios para aplicarla:

    • No inventes nostalgia: reconoce la del usuario.
    • Usa estímulos sensoriales coherentes y repetibles.
    • Construye rituales, no campañas aisladas.
    • Habla desde la humanidad, no desde la venta.
    • Deja espacio a la interpretación emocional del usuario.

    En última instancia…

    La Navidad es memoria, es identidad en movimiento, y las marcas que lo entienden no solo venden: se convierten en parte del paisaje emocional de sus clientes.

    Cuando una campaña consigue que el espectador piense “esto me recuerda a mi infancia”, no está apelando al pasado: está diseñando comportamiento en el presente.

  • Vezzo y el Globo Persuasivo

    Vezzo y el Globo Persuasivo

    En su libro canónico “Influence: The Psychology of Persuasion”, Robert Cialdini menciona el Principio de Reciprocidad como uno de los pilares de su ensayo, junto con otros como Autoridad, Escasez o Unidad.

    Recientemente entrevistado en el podcast Nudge (encontrarás el link al final), recalca que este debe ser uno de los principios que debes memorizar, pues apela a un comportamiento arraigado profundamente en nosotros.

    ¿En qué consiste?

    El concepto es tan sencillo como potente: nos sentimos obligados a devolver favores, regalos o comportamientos positivos que recibimos de otros.. Y lo curioso es que, normalmente, la gente devuelve más de lo que recibe.

    Lo habrás visto en múltiples ocasiones: pruebas gratis en supermercados, lead magnets gratuitos que percibimos como valiosos… o en el propio proceso de ventas, una primera concesión por parte del comercial o, simplemente comenzar el proceso con una sonrisa o halago.

    Actuando de forma invisible, estos regalos no solicitados y pequeñas sorpresas, apelan a esta poderosa palanca del comportamiento, haciéndonos más susceptibles a aceptar peticiones futuras, tratando de pagar algo que percibimos como una “deuda pendiente”.

    Vezzo y Globo Persuasivo

    Tomando como ejemplo el famoso experimento de Steve Martin en los McDonald´s de América del Sur, muchas compañías han replicado (incluso al pie de la letra) la siguiente estrategia:

    Steve dividió a las familias que acudían al restaurante, con niños, en dos grupos: a unos les dieron un globo como regalo por la visita, pero a otros se los dieron el globo tan pronto como entraron.

    ¿El resultado? Las familias que recibieron el globo al entrar pidieron un 25% más, atraídos por esta fuerza invisible a saldar su deuda pendiente. 

    Como expertos en behavioral design analizamos continuamente este tipo de patrones en proyectos reales para evaluar el impacto sobre las estrategias de marketing, pero no somos inmunes a su influencia.

    Vezzo, una conocida cadena de comida italiana, replica este experimento al pie de la letra, con un paso más allá: regalan a cada niño que pasa por delante del establecimiento un globo, independientemente de que hayas entrado en el restaurante.

    Y en este caso el reclamo es doblemente efectivo: los peques vinculan la visita al centro comercial al “globo gratis”, y los adultos sienten esa necesidad imperiosa de pagar su deuda.

    ¿El resultado? 🍕 4 pizzas, 🥃 bebidas y 🍨 postres (que no se comparten)…  y la sensación al regresar a casa de que habíamos sido claramente influenciados por este principio de persuasión, quizá el más sencillo de todos, pero tremendamente poderoso.

    Lo prometido es deuda

    Si quieres escuchar al maestro Cialdini hablando largo y tendido sobre este principio de persuasión, te recomendamos su entrevista en Nudge:

    Aplícalo en tu próximo proyecto

    Contacta con nosotros para descubrir cómo este y otros principios pueden ayudar a aplicar acciones de marketing con éxito

  • El efecto FOMO en las promociones: cómo las marcas usan la urgencia para enganchar.

    El efecto FOMO en las promociones: cómo las marcas usan la urgencia para enganchar.

    El FOMO —“fear of missing out” o miedo a perderse algo— se ha convertido en el aliado silencioso de las marcas, especialmente en temporadas de compras masivas como el Black Friday o las ofertas navideñas. Lo que empezó como una sensación emocional cotidiana —ese nerviosismo de ver que otros disfrutan de experiencias que tú no vives— se ha transformado en una importante herramienta de marketing, diseñada para motivar decisiones rápidas y generar engagement.

    ¿Dónde está el truco? Desde la perspectiva del behavioral design, el FOMO activa tres principios psicológicos clave:

    1. La escasez percibida: cuando un producto aparece con “quedan 2 unidades” o “¡últimas 24 horas!”, nuestro cerebro interpreta que la oportunidad es limitada y valiosa, disparando la urgencia y la acción inmediata.
    2. La presión social: ver que otros ya han comprado o que un artículo es tendencia provoca un sesgo de conformidad y deseo de pertenencia —nadie quiere quedarse fuera del “evento” colectivo.
    3. La recompensa anticipatoria: la expectativa de obtener algo deseado genera dopamina incluso antes de la compra, convirtiendo la adquisición en un pequeño boost emocional.

    En términos de gamificación, muchas promociones incorporan dinámicas sin necesidad de premios físicos adicionales: contadores regresivos, barras de stock que se vacían en tiempo real, rankings de productos más comprados o niveles de recompensa según la rapidez de la acción. Estas micro-mecánicas transforman una simple compra en un juego de rapidez, estatus y pertenencia, aplicando el principio del “game without game”: no se necesitan puntos ni medallas si logras que el usuario perciba progreso, logro y/o reconocimiento.

    Desde el punto de vista del diseño de experiencia, las campañas con FOMO están optimizadas para generar acción inmediata: botones de compra visibles, mensajes claros sobre disponibilidad limitada y notificaciones que refuerzan la urgencia. La narrativa no se limita a ofrecer un descuento: comunica escasez, exclusividad y relevancia personal (“Solo tú puedes aprovechar esta oferta hoy”), conectando emocionalmente con el consumidor.

    El efecto FOMO también tiene una dimensión estratégica para las marcas. Cada clic, cada carrito abandonado y cada compra proporciona datos valiosos sobre comportamientos, preferencias y momentos de decisión. La recompensa para el consumidor es simbólica: sentir que ha conseguido un buen trato; la recompensa para la marca es comportamental y a largo plazo: fidelización, urgencia percibida y mayor conversión.

    Las campañas exitosas, por tanto, nos dejan varias lecciones aplicables a cualquier estrategia de marketing basada en behavioral design:

    • Escasez percibida y temporalidad: Haz que la oportunidad sea limitada y visible, pero también creíble. Los usuarios no viven en una burbuja, y cada vez detectan con mayor rapidez esos pequeños “trucos” que intentamos aplicar con ellos.
    • Recompensa emocional anticipatoria: La sensación de “estar dentro” puede ser más poderosa que el propio producto.
    • Presión social positiva: Mostrar que otros participan refuerza la acción, pero además evita que se perciba como manipulación (de nuevo aflora el concepto de la credibilidad).
    • Diseño claro y fricción mínima: Facilita la acción inmediata; debemos tener en cuenta que cada segundo cuenta en la decisión de compra.
    • Narrativa que conecta: Convierte un descuento en una experiencia memorable, no en un simple número.

    En resumen, hemos visto que el FOMO no es solo una estrategia de urgencia; es un juego de emociones, percepción y diseño conductual. En esta temporada clave e intensa de compras (des)controladas, cada promoción que activa miedo a perderse algo está, en realidad, transformando la ansiedad en engagement y la escasez en conexión. Las marcas que lo aplican bien logran que los usuarios sientan que aprovechan una oportunidad única, cuando en realidad están participando en un diseño pensado para motivar acción, fidelidad y conversación.

  • BeReal y el modelo Fogg: el secreto para que tus usuarios compartan sin filtros ni excusas

    BeReal y el modelo Fogg: el secreto para que tus usuarios compartan sin filtros ni excusas

    Desarrollado en 2009 en Stanford por el científico de comportamiento de BJ Fogg mientras trabajaba sobre la tecnología persuasiva y expresado por la archiconocida ecuación B = MAT, este modelo, aunque quizá simplista, esconde un gran potencial que puede darte un enfoque muy interesante a la hora de diseñar tu siguiente producto digital.

    Quédate y te contamos cómo.

    ¿Qué es el modelo Fogg? Motivación, habilidad y triggers para cambiar comportamientos

    El modelo de comportamiento de Fogg es un framework muy uitilizado para enteder (y diseñar) cuando un cambio de comportamiento se produce, mediante la conjunción de 3 elementos: Motivación, Habilidad y Activación, o con sus siglas en inglés:

    Behavior = Motivation Ability Prompt

    El modelo establece que si alguno de estos elementos no existe, el comportamiento no se produce, aunque como veremos más adelante, en algunos casos puede dejar algunas áreas de segundo orden sin contemplar.

    Motivación

    El deseo de realizar el comportamiento, controlando que el usuario pueda acometer por ejemplo una tarea de mayor o menor dificultad, dependiendo de su motivación ante la misma.

    Habilidad

    Facilidad o dificultad de realizar el comportamiento. Dentro de este área existen múltiples facotres a tener en cuenta, sobre los que Fogg menciona el tiempo, dinero, esfuerzo físico, esfuerzo mental, desviación social y rutina.

    Activación

    Esta es la palanca que inicia el comportamiento. Alguien puede estar muy motivado y disponer de la habilidad necesaria para realizar el comportamiento, pero sin una llamada a la acción, una chispa que encienda la mecha, es poco probable que el comportamiento ocurra.

    Lo interesante es que los 3 elementos deben actuar en conjunción, de forma sincronizada, por lo que si detectamos que un determinado comportamiento esperado no se produce, este framework nos puede ayudar a realizar las preguntas adecuadas.

    Es posible que pequemos de tratar de activar de al usuario con múltiples palancas, por una gran variedad de canales, pero que el proceso que le pedimos que realice no encaje con su habilidad (percibida).

    O puede ser también que el usuario se sienta capaz, le impactemos en el momento perfecto, pero la propuesta no se suficientemente interesante y motivadora, etc.

    Existen multitud de opciones, pero este modelo nos sirve de brújula para investigar en la dirección adecuada, y tomar nuestras decisiones de diseño de forma razonada, ordenada, y respaldada por heurísticos de las Ciencias del Comportamiento.

    BeReal en acción: cómo aplica el modelo para fomentar la autenticidad diaria en millones de usuarios

    BeReal es la apliación de captura de fotos que encandiló a la generación Z allá por 2022. Básicamente, solicita a los usuarios una vez al día para que suban una foto en un espacio corto de tiempo, con el objetivo de que tus amigos puedan ver un destello real de tí, de tu yo aunténtico.

    ¿De qué manera crees que esta app puede utilizar el modelo Fogg para reforzar este comportamiento esperado? Piensa, antes de continuar, si fuera tu propio producto, de qué forma podría cumplir con los 3 pilares (MAP).

    Motivation

    Como en muchas redes sociales como Instagram o Facebook, los usuarios desean estar conectados con sus amigos, reforzando un sentimiento de pertenenica.

    Ability

    La experiencia de usuario de la app se ha optimizado desde un primer momento para que los usuarios estén en contacto con el menor esfuerzo posible: recibes la notificación de BeReal, te tomas una foto y pulsas «Enviar»

    Prompt

    Como en el punto anterior, una notificación push en el momento perfecto, conociendo tus comportamientos de uso, insta a la acción inmediata, reforzando el comportamiento ayudado por los otros dos pilares.

    Una herramienta poderosa que te ayudará a desbloquear logros

    Como ocurre continuamente conforme te adentras en el Behavioral Design y la psicología, te animamos a que pruebes a aplicar este modelo en los comportamientos que te veas realizando en tu día a día sin apenas pensar, tanto en el uso de productos digitales como en tus tareas cotidinas.

    Estas «Gafas de Fogg» poco a poco te permitirán analizar productos de tu competencia con mayor efectividad, y serán una cascada de ideas, muy útiles cuando te enfrentes a los retos de diseño de tu próximo proyecto.

    Y recuerda que Ludikong, con nuestro plan «Adventure», te ayudamos tu problema o proyecto existente: Descubrimos fricciones, evaluamos oportunidades, definimos KPIs y aplicamos este y otros modelos de comportamiento para que tu proyecto alcance todo su potencial.

    El próximo paso: agenda con nosotros para diagnosticar tu escenario y ver si un piloto tiene sentido, ¿qué te parece?

    Contacta con nosotros para descubrir cómo este framework puede ayudar al éxito de tu próximo producto

  • Nudges digitales: los empujoncitos invisibles que cambian comportamientos online

    Nudges digitales: los empujoncitos invisibles que cambian comportamientos online

    Si estás interesad@ en diseño de comportamiento, habrás oído el término nudge múltiples veces, ya que desde que Richard H. Thaler y Cass R. Sunstein publicaran en 2009 su libro homónimo, este concepto tan sencillo y a la vez tan poderoso ha ayudado a entender y optimizar las experiencias de nuestros usuarios.

    El poder de lo que (casi) no se ve

    Imagina por un momento que te encuentras en una cafetería y las frutas se encuentran colcocadas a la altura de tus ojos, mientras que los pasteles se encuentran en un segundo plano.

    Sin que te des cuenta, pides una manzana en lugar de un donut. Esto es un nudge o empujón: un pequeño cambio en el entorno que guía tu decisión sin obligarte.

    ¿Qué es un nudge y por qué funciona tan bien en digital?

    En su libro, Thaler y Sunstein basan su definición en la arquitectura de la elección y lo definen como cualquier modificación en el entorno de decisión que altera el comportamiento de una manera predecible, sin prohibir opciones ni cambiar incentivos económicos.

    Su potencial es muy interesante, y el entorno digital es el lugar perfecto donde probar su efectividad, introduciéndolos en diferentes puntos de los procesos, con cero fricción y obteniendo rápidamente datos en tiempo real.

    El lado oscuro: cuándo un nudge se convierte en dark pattern

    En LUDIKONG creemos que es posible obtener un win-win entre compañías y sus clientes con honestidad, sin necesidad de caer en dark patterns que puedan ser efectivos maximizando KPIs a costa de invocar sesgos cognitivos que manipulen el comportamiento de nuestros usuarios, y el nudge puede cruzar esta fina línea.

    Para nosotros es sencillo: los nudges deben ser transparentes y beneficiar al usuario, no al emisor. Un ejemplo: ofrecer por defecto una opción personalizada de suscripción a nuestro contenido vs. manipular el proceso para realizar una auto-renovación oculta.

    Y este diseño de comportamiento ético tiene premio: en encuestas realizadas a usuarios sometidos a diferentes nudges, aquellos implementados de una forma ética pueden aumentar la puntuación NPS más de un 15% (fuente: https://www.cowryconsulting.com/newsandviews/increase-nps-using-behavioural-science)

    Pequeños detalles, un gran impacto

    Existen multitud de proyectos reales donde la aplicación de nudges creativos han provocado impactos medibles, alineando los objetivos de negocio con la intención de los usuarios.

    Todos ellos siguen nuestro método: problema → comportamiento → diseño → integración → métrica.

    Un ejemplo fueron los recordatorios SMS para Vacunación COVID-19, donde las ausencias en las citas de vacunación provocaban una reducción en la cobertura durante la pandemia.

    Para incentivar el comportamiento deseado, se diseñaron SMS personalizados con hora / centro e información de utilidad como «el 80% de tu comunidad ya se ha vacunado», integrado directamente con las plataformas de salud pública.

    Esto aumentó hasta en un+25% las tasas de cobertura, comparado con la opción sin recordatorio, según el CNMC.

    En Ludikong, nuestra pasión por el detalle a la hora de entender el comportamiento de los usuarios nos permite plantear nudges creativos, fácilmente implementables en los proyectos de nuestros clientes, midiendo e iterando rápidamente, obteniendo resultados rápidamente.

    Integración real: del nudge al stack del cliente en 14 días

    En Ludikong, convertimos objetivos en comportamientos medibles. En nuestro plan «Adventure», analizamos tu problema o proyecto existente: Descubrimos fricciones, evaluamos oportunidades, definimos KPIs y te sugerimos nudges éticos en un plan inicial: hipótesis, integración en tu stack (CRM / LMS).

    El próximo paso: agenda con nosotros para diagnosticar tu escenario y ver si un piloto tiene sentido, ¿qué te parece?

    Contacta con nosotros para descubrir todo el potencial de los nudges

  • De Melody a Tommy Cash: ¿Qué nos enseña Eurovisión sobre behavioral design?

    De Melody a Tommy Cash: ¿Qué nos enseña Eurovisión sobre behavioral design?

    Cuando hablamos de engagement o diseño de experiencias, pocas plataformas y eventos logran captar la atención masiva y sostenida del público como lo hace Eurovisión. Más allá del show musical, Eurovisión 2025 ha sido una masterclass en behavioral design, viralidad y estímulo emocional, y este año, dos casos lo han demostrado con creces: Tommy Cash y su pegadizo «Espresso Macchiato», y la explosiva actuación de Melody con «Esa diva».

    Ambos ejemplos no solo captaron votos y trending topics, sino que activaron comportamientos observables: repetición compulsiva del estribillo, memes instantáneos, microinteracciones en redes sociales, y lo más importante: conversación sostenida en el tiempo

    Espresso Macchiato: el loop perfecto

    Tommy Cash jugó con todos los recursos del engagement loop: estímulo (ritmo y estética pegajosa), acción (enganche visual + musical), recompensa (aplausos, viralidad, humor). Su actuación no buscaba solamente votos: buscaba crear una experiencia viral (de la cual incluso él mismo llega a bromear en sus redes).

    El concepto tiene además mucho en común con las mecánicas de gamificación: feedback inmediato, sensación de control, humor absurdo y una estética reconocible. Hablamos de microcontenidos gamificados que premian la interacción y el «looping» emocional: escucho → río → comparto → recuerdo → vuelvo. 

    Esa Diva: identidad, refuerzo positivo y narrativa

    Melody, por su parte, no solo cantó. Encarnó un arquetipo. Su tema, “Esa diva”, no solo es una canción: es una narrativa de autoafirmación construida sobre el refuerzo positivo, el diseño de personaje y la “memética” emocional.

    Desde el punto de vista del behavioral design, es un ejemplo de modelo aspiracional potenciado por el poder de la repetición, el lenguaje corporal y el refuerzo social. En términos de gamificación, podríamos decir que durante toda la pretemporada trabajó en el diseño del avatar perfecto para obtener máximos puntos en carisma y reconocimiento de marca.

    Lo que Tommy Cash y Melody nos han demostrado en Eurovisión 2025 no es solo el poder del espectáculo, sino el valor estratégico de aplicar principios de gamificación y diseño conductual para construir experiencias memorables, virales y emocionalmente resonantes.

    Ambos artistas activaron, de forma deliberada o intuitiva, mecánicas propias del engagement design: refuerzo positivo, construcción de identidad aspiracional, loops de retroalimentación, y un diseño estético y narrativo coherente con su target emocional. El resultado: comportamientos observables y medibles como la repetición del contenido, el boca-oreja digital, el meme y la identificación emocional.

    Esta vez, nos vamos a despedir con un: “Mi amore, mi amore, espresso macchiato, macchiato, macchiato por favore, por favore…”

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    Team Ludikong.